Hola yo soy Myriam Orozco Zárate, soy misionera  y hoy te voy a platicar lo que han significado en mi vida las mega misiones, este año viví las mega misiones como responsable de unidad, es decir, visitando diversas comunidades del estado de Jalisco, en las que se encontraban nuestros equipos de Juventud misionera femenina misionando.

Para mí, ser misionero es recibir un llamado a servir y a ser un instrumento para que Dios por medio de él lleve su mensaje a todos los lugares del mundo, porque Dios está en todas partes, pero no todos lo conocen y esa es nuestra misión, obedecer a su llamado: “Id al mundo entero y predicar el evangelio”.

Son muchas las experiencias las que he sumado a lo largo de mis más de 10 años misionando, pero son aún más las bendiciones que han llegado a mi vida desde el momento que decidí decirle sí a Cristo por medio de este apostolado. Siempre había escuchado que Dios no se deja ganar en generosidad y que el siempre da el mil por uno, pero eso es algo que sólo se entiende cuando vives tu primera misión, es decir, Dios sabe lo que necesitamos antes de pedírselo, pero cuando tu ayudas a que se cumpla lo que él desea en tu vida y en la de los demás, el resto se da por añadidura y él lo transforma todo, incluyéndote a ti mismo.

Ser misionero es un privilegio, te diré porque, es un privilegio porque estás siguiendo los pasos de Jesucristo, es mucho más de lo que podemos imaginar, no es de extrañarse que cuando estás misionando te das cuenta que hay gente generosa dispuesta a abrirse al amor de Dios y a entregarte lo mejor de sí misma, pues saben que han recibido el mejor regalo que se les puede dar, la FE. Y tú, MISIONERO, haz sido ese instrumento que se prestó para que alguien conociera el verdadero amor y también has sido tú quién ha recibido el regalo de la FE.

Sólo necesitas desprenderte de ti mismo para experimentar todo este milagro y dar ese SI firme. Dios nunca se equivoca, esa es otra verdad y cuando él ve en ti un alma dispuesta pone todos los medios para que digas “YO SI VOY”, y el resto, eso ya lo sabemos los que hemos dado ese SI a Cristo…… El resto lo hace él.

Yo tengo ALMA MISIONERA, Un corazón misionero entrega lo mejor de sí, y eso significa que lo mejor que tenemos es quizá lo más sencillo, tu esencia, tu alegría, el amor a la vida, y sobre todo el amor a Dios, llevar el evangelio con alegría, dar testimonio de lo que Dios ha hecho en mí, en mi vida, sonreír al llamar a la puerta de cada hogar, escuchar con paciencia, hablar con caridad, cantar….. un buen amigo te habla de Dios pero un misionero te lleva a Dios y entender que Dios te da los medios y las dones para realizarlo es algo que te llena el alma y que  traspasa fronteras, cuando eres misionero no hay divisiones, ni razas, ni sociedades, se es uno en al amor. Tu le dices que si a Cristo y el camina en tus zapatos.

Siempre había vivido todas las mega misiones tratando de imitar a Cristo, haciendo lo que él hacía, como un apóstol más y compartiendo con todos los misioneros y con las comunidades esta semana santa, pero  este año tuvimos una hermosa bendición. Una parte indispensable del misionero y que nunca podemos dejar de lado, es nuestra estrella, la que siempre nos guía, el ejemplo de virtud y fortaleza en la misión, si así es, es La Virgen María.

Y estas misiones tuvimos un regalo súper especial, la mejor misionera del mundo nos acompaño, ella quiso venir con nosotros en estas misiones, La Virgen Peregrina por primer año se hizo presente en las megas en Jalisco y de qué manera, es el primer año en el que el apostolado de Virgen Peregrina nos fortalece llevando una Virgen por cada equipo a peregrinar a todas las comunidades que misionamos.

 No puedo dejar de pensar que cuando Jesús comenzaba su jornada, se iba con la bendición de Ella, de su madre y fue Ella quién lo enseño a orar, a amar a Dios, a entregarse a la misión que Dios le encomendó y era Ella quién lo sostenía en toda su misión.

El testimonio que viví en cada comunidad fue algo increíble, las misioneras de verdad disfrutaron llevar a la Virgen a peregrinar, Su amor se hizo presente en cada visiteo, pude ver como cada misionera dedicaba un lugar, un momento y un detalle especial a nuestra Virgen Peregrina, siempre sentían la necesidad de cuidarla y agradarla pero en realidad era ella, La Virgen, quien nos cuidaba y buscaba agradarnos todo el tiempo porque su fuerza nos hizo levantarnos cuando estábamos cansadas, era maravilloso sentir esa fragilidad y correr a hablar con Ella, saber que estaba en nuestra comunidad y en nuestro equipo y tener la certeza que nos escuchaba, consagrar la misión en manos de la mejor misionera fue la mejor experiencia que como misioneros pudimos tener, no se puede ser misionero sin tener a la Virgen en nuestro corazón, no se puede llevar el mensaje de Dios si no se experimenta el amor de quién más ama a Cristo, su santísima madre, La Virgen María.

 La felicidad esta en cualquier momento donde hay amor y María es la más grande expresión del amor, donde está Ella está la felicidad.

La Virgen me llevo de la mano en una misión que se trataba de acercarme a Dios, me enseño como amo Ella a su hijo y que ser misionero es un llamado al amor, que llevar a Cristo a cualquier rincón del mundo es solo una cuestión de amor y que Ella fue la primera misionera que  dio a su hijo a la humanidad para que por medio de El aprendiéramos el verdadero significado del amor,  nuestros corazones están llenos del  amor de Dios porque Dios está en cada alma a la que pudimos misionar, en cada alma a la que tocamos con nuestro testimonio el cuál se engrandeció con ayuda de nuestra Virgen Peregrina.

Desprenderte de ti misma significa empezar a amar a los demás, el tiempo mejor invertido es el que se entrega al servicio del más necesitado y estas misiones comprendí que María fue capaz de desprenderse de todo para amar al extremo, quién como Ella para enseñarnos a amar a Jesús, quién como Ella para motivarnos a entregarnos a la misión que Dios tienen para cada uno de nosotros.

María me llevó en estas misiones a entregar el corazón, quien confía en la Virgen nunca se sentirá defraudado y es por eso que estas mega misiones las confiamos a la mejor misionera, la Virgen Peregrina.

Nunca se es tan pobre para no poder dar una sonrisa y nunca se es tan rico para creer que no la necesitas.

 Todos tenemos una misión, estas palabras deben formar parte de nosotros, hacerlas nuestras, hacerlas vida. Nunca he experimentado tanta felicidad como cuando voy de misiones.

El mundo necesita ahora más que nunca escuchar que aún hay esperanza, que Dios nunca falla y que está siempre con nosotros, que nos quiere llenar de bendiciones y justo es ella, la Virgen quien nos ha llevado y ayudado a peregrinar, a llevar la buena nueva, el mensaje de esperanza que necesitamos todos, regresar al camino, retomar el vuelo de la fe.

Tocando cada puerta y abriendo muchos corazones con la Virgen María, que dicha poder peregrinar a su lado. Yo quiero que siempre nos acompañe la Virgen Peregrina.

Mega misión 2015 la mejor experiencia, la mejor compañía y las más grandes bendiciones al lado de la Virgen Peregrina. Gracias Madre del cielo por estar tan presente y enseñarnos a ser misioneros como tú.

¡VEN DE MISIONES!

Juventud Misionera Femenina Jalisco.